Jeni Angel is doing some serious online gaming when her girlfriend, Madi Collins, comes in to see what she’s up to. Madi doesn’t like being ignored over a video game, so she starts rubbing Jeni’s pussy to get her attention. Soon the pair are trading the controller back and forth as the eat pussy and scissor each other. Jeni grabs a second controller and the two start playing against each other. This is when their roommate (Van Wylde) comes in and gets to have his way with both horny gamer girls. A big dick is a great way to cool down after a hard gaming session.
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